Desde el ente productivo piden coordinación con los tres niveles de Gobierno para activar mecanismos que contribuyan a paliar este tipo de situaciones en la Bolivia del campo
La afectación por las inundaciones y heladas registradas en las últimas semanas en diferentes regiones del departamento cruceño alcanzó a 45.000 hectáreas, según el reporte expuesto este lunes por el presidente de la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO), José Luis Farah.
El ejecutivo manifestó que este dato emerge tras la levantamiento de la información que corresponde a los subsectores aglutinados en el ente productivo, donde entre el 20% y el 25% de productores de las zonas afectadas registraron afectación. A esto se suma que no se puede recuperar nada de al menos 5.000 hectáreas.
La mayor afectación alcanza a los cultivos de granos, principalmente sorgo y trigo, de acuerdo con el reporte, siendo los municipios de Cuatro Cañadas, San Julián y Okinawa los más perjudicados debido a los embates de las precipitaciones.
Mientras que la helada afectó mayormente al municipio de Vallegrande, así como las zonas altas de otras jurisdicciones de los Valles cruceños, según informó el presidente de la CAO.
Ante este escenario, Farah advirtió que es imprescindible encontrar mecanismos para fortalecer los sistemas de prevención de daños, labor que se debe llevar delante de manera conjunta con los tres niveles del Estado.
Farah expuso que se debe planificar este asunto a través de mesas técnicas donde se aborden asuntos como mecanismos para mejorar el sistema hídrico de la Bolivia del campo y con medidas que fortalezcan ámbitos como el de canales y defensivos en las regiones afectadas, así como también se debe evaluar el factor del cambio climático.
Mientras tanto, desde el Comité de Operaciones de Emergencia Departamental (COED), la directora Paola Weber señaló que este martes se envió 13,1 toneladas de alimentos, medicamentos y brigadas médicas para beneficiar a 950 familias de otras regiones afectadas como son Yapacaní, Urubichá y Ascensión de Guarayos.
“Las aguas han ido bajando, todavía tenemos zona anegadas, pero más que todo en sus cultivos, hay caminos anegados; entonces en relación a ese tipo de situación vamos ir viendo qué otro tipo de ayuda vamos a dar a estos municipios. Continuamos con el trabajo que se viene realizando de manera coordinada. Esperemos que las lluvias que van a continuar por el fenómeno del niño, no tengan el impacto que se ha tenido”, indicó Weber.
Asimismo, aseveró que hay 17 municipios declarados en desastre, de las cuales 11 son por inundaciones entre ellos Quirusillas, Urubichá, Ascensión de Guarayos, El Puente, Okinawa Uno, Cabeza, Yapacaní, Saavedra, Fernández Alonso, Cuatro Cañadas y San Julián, además de tres por déficit de precipitación: San Rafael , Cuevo y Lagunillas.