El barrio Kochi en el municipio de Arque, en la zona andina, sufrió el embate de una riada la noche del miércoles. Esta arrasó 16 casas, huertos, cultivos y corrales. Todo quedó sepultado con toneladas de lodo y los pobladores tuvieron que huir para salvar sus vidas.  El turbión dejó irreconocible el lugar. Las casas de adobe y los sembradíos desaparecieron, sólo quedan en el recuerdo de sus afligidos propietarios que ahora buscan refugio en la casa de un pariente o el coliseo municipal, donde la Alcaldía abrió un albergue.  Los pobladores verificaron ayer los daños que la mazamorra provocó en su barrio al destruir todos sus cultivos y 16 casas de adobe. En medio sólo estaban los cadáveres de sus reses y ovejas que se ahogaron. “Tenemos pánico de que vuelva el agua, porque estamos en una hoyada y si no se hace el muro de contención el río volverá a entrar”, dijo un agricultor.   Son al menos 60 familias afectadas, pero 16 lo perdieron todo. El alcalde Wily Ordoñez declaró zona de desastre natural al municipio, que desde noviembre soporta los desbordes del río Arque y otros afluentes, por lo que pedirá ayuda de la Gobernación y gobierno nacional para la reconstrucción.  El secretario ejecutivo de la Mancomunidad de la Región Andina, Franulic Huanca, confirmó que Arque es una zona de desastre, porque sus comunidades soportaron cuatro riadas.  La primera riada fue el 15 de noviembre, la segunda el 26, la tercera posteriormente y la cuarta el 8 de diciembre. Esta afectó al barrio Kochi.  “Tenemos 16 viviendas destruidas y el tema agrícola es desde el primer evento”, dijo. “Nosotros vamos a recurrir al plan nacional de viviendas para reponer las casas de las familias afectadas”, adelantó. Expresó que lo más urgente es la reconstrucción de las casas derrumbadas y después restituir la producción agrícola.

Más lugares  Además de Arque los municipios de la zona andina de  Sicaya, Tacopaya y Bolívar, se declararon en emergencia por los daños que ocasionó el desborde de los ríos. En tanto, en el valle alto los municipios de Cliza y Toco aún soportan el daño del desborde de dos ríos hace más de una semana. Son más de mil las familias afectadas y 62 las casas que se desplomaron.  Desde noviembre a la fecha son más de 18 municipios afectados por diferentes fenómenos desde lluvias, heladas hasta granizadas.

Tiquipaya La intensa lluvia que cayó el miércoles en el municipio de Tiquipaya afectó calles, cultivos y viviendas de al menos tres zonas. En tanto, la Unidad de Gestión de Riesgos (UGR) aún cuantifica los daños.  Chillimarca, Trojes y Kanarrancho son las zonas que sufrieron daños. Hasta ayer la cuantificación continuaba; pero los datos preliminares revelan que más de una decena de familias, especialmente en Chillimarca, enfrentan perjuicios sobre todo en la parte agrícola.  El funcionario de la UGR de Tiquipaya, Luis Salvatierra, aclaró que las afectaciones no fueron producto del desborde de algún río, sino de los canales de riego. Contó que la noche del miércoles se desplazó personal para que ayude a retirar el lodo y agua de algunas viviendas.  Ayer, en un recorrido, varias de las calles de esas tres zonas se encontraban con piedras y barro que trajo consigo el colapso de los canales de riego. Vecinos, especialmente aledaños a los canales, pusieron saquillos con tierra para evitar que el agua ingrese a sus viviendas.  El presidente del Distrito 5 de Tiquipaya, Mauricio Gutiérrez, dijo que las calles son ríos cada época de lluvia, debido a que el municipio no cuenta con desagües pluviales. Pidió a las autoridades acelerar los trabajos de prevención.  Los pobladores de Tiquipaya viven en vilo por el temor a un nuevo aluvión en el río Taquiña, como los registrados en 2018 y 2020 que  cobraron seis vidas.